摘要
Background: older adults are at increased risk of vitamin D deficiency as a result of limited sun exposure and inadequate vitamin D intake. Despite this evidence, there are scarce data regarding the concentration of 25(OH)D and its metabolites among older adults with physical disability. Methods: the National Health and Nutrition Examination Survey 2007-2014 data were collected to compare 25(OH)D3, 25(H)D2, and total 25(OH)D concentrations among adults aged 60 years and older with and without physical disability. Moreover, general linear models adjusted for potential confounders were used to examine the independent effect of vitamin D intake, physical activity status and body mass index (BMI) categories on 25(OH)D concentrations by disability status. Results: of 6,250 older adults, 17.9% were defined as physically disabled. 25(OH)D concentrations were 71.3 and 78.2 nmol/l in subjects with and without disability, respectively. However, after adjustment for potential confounders, similar 25(OH)D concentrations were seen between disabled subjects and their non-disabled counterparts (75.6 vs 77.5 nmol/l; p = 1.17). In contrast, older adults with disability had significantly increased 25(OH)D2 concentrations (8.3 vs 6.1 nmol/l; p < 0.05). Notably, older adults with a daily vitamin D intake of ≥ 15 mcg achieved sufficient 25(OH)D concentrations, regardless of their disability status. Conclusion: 25(OH)D concentrations did not significantly differ among older adults by disability status. This finding was attributed to increased 25(OH)D2 concentrations among those with physical disability. Thus, adequate vitamin D intake is an effective strategy to maintain sufficient 25(OH)D concentrations, particularly among disabled older adults.Antecedentes: los adultos mayores tienen mayor riesgo de deficiencia de vitamina D debido a una limitada exposición al sol e ingesta inadecuada de vitamina D. A pesar de esto, existen escasos datos sobre la concentración de 25(OH)D y sus metabolitos en adultos mayores con discapacidad física. Métodos: la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2007-2014 se analizó para comparar las concentraciones de 25(OH)D3, 25(OH)D2 y 25(OH)D total entre los adultos mayores con y sin discapacidad física. Se usaron modelos generalizados lineales ajustados por cofactores para examinar el efecto independiente de la ingesta de vitamina D, los niveles de actividad física y las categorías del índice de masa corporal (IMC) sobre las concentraciones de 25(OH)D por condición de discapacidad. Resultados: de un total de 6.250 adultos mayores, el 17,9% tenía discapacidad física. Las concentraciones de 25(OH)D fueron 71,3 y 78,2 nmol/l en sujetos con y sin discapacidad, respectivamente. Sin embargo, después del ajuste por covariables, niveles similares de 25(OH)D fueron observados entre los sujetos con discapacidad y sus homólogos sin discapacidad (75,6 vs. 77,5 nmol/l; p = 1,17). En contraste, las concentraciones de 25(OH)D2 fueron significativamente mayores en los sujetos con discapacidad física (8,3 vs. 6,1 nmol/l; p < 0,05). En particular, los sujetos con una ingesta diaria de vitamina D de ≥ 15 mcg alcanzaron niveles adecuados de 25(OH)D, a pesar de su condición de discapacidad. Conclusión: las concentraciones de 25(OH)D fueron similares entre los adultos mayores por condición de discapacidad. Este hallazgo fue atribuido al aumento de la concentración de 25(OH)D2 entre las personas con discapacidad física. Así, la ingesta adecuada de vitamina D es una estrategia efectiva para mantener niveles óptimos de 25(OH)D, particularmente entre los adultos mayores con discapacidad.